Es el término que ha empleado el pintor para definir la
original y nueva técnica de la que es creador y que, como su nombre indica,
tiene como base, lana cruda de oveja teñida con anilina.
Las hebras de lana tienden a pegarse las unas a las otras por su forma
sinusoidal, lo que aprovecha el artista para ponerlas en capas superpuestas
Las hebras previamente teñidas con los colores y matices, van colocándose
con los dedos según lo requiere el cuadro. (Algunos cuadros tienen un esbozo
previo en pastel ).
Una vez concluido el dibujo, se protege con cristal, que aplasta ligeramente
las fibras de lana, conservando sin embargo la sensación de esponjosidad y
aire interior, y dando profundidad al cuadro sobre todo si se mira desde
cierta distancia.
Las ventajas y peculiaridades de esta técnica innovadora, original y única
son:
1. La infinidad de colores, matices, tonos y efectos.
2. La suavidad y delicadeza de las fibras y su esponjosidad, con lo que se
consigue efectos únicos y transparencias.
3. La ausencia de elementos artificiales o sintéticos que se emplean en la
pintura corriente. Al basarse solamente en lana pura de oveja y tintes
orgánicos, es natural, por lo que no hay elementos que pueden provocar una
disociación de los colores.
Por lo tanto el cuadro conserva siempre la brillantez de sus colores
originales.
|
|